Él árbol dorado o los árboles dorados que se pueden observar en la comunidad de Las Lajas, maravilla a quienes llegan a esta comunidad con el fin de observarlos; conocido comúnmente como “Palo amarillo”, “árbol lechón” o “papelillo amarillo”, éste árbol de características de copal como lo es su textura de fino papel en su corteza, solo crece en condiciones de altura y humedad específicas, por lo que solo pueden ser observados en elevaciones rocosas semi áridas.

Se cree que pertenecen a la especie de Burseras, siendo “Bursera simaruba” nuestro árbol. En el sur del país, éste árbol es considerado sagrado, ya que representa una antiquísima leyenda Maya que habla sobre dos hermanos, Kinich y Tizic, de personalidades totalmente opuestas, uno bastante noble y bienhechor y otro abusivo y altanero; según la leyenda un día se enamoraron de la doncella Nicté Há, y al entrar en combate por su cortejo hicieron enojar a los dioses, en la lucha ambos hermanos murieron y al llegar al otro mundo, suplicaron el perdón de los dioses, ambos rogando por poder ver a su amada Nicté Há nuevamente.

Así fue como Tizic renació como un árbol de Chechen, el cual secretaría veneno dentro de sus ramas y quemaría a cualquiera que se acerque. Kinich en cambio, renació en forma de un árbol de Chakah. Cuya savia curaría todo lo tóxico del Chechén.

El árbol Chechén de corteza roja resulta tóxico al humano y el árbol Chakáh, de piel amarilla, por el contrario es medicinal, llegando a curar la toxicidad del Chechen.